La última derrota frente a los Timberwolves deja a los de San Francisco en una situación muy delicada. ¿Conseguirán los Golden State Warriors clasificarse para los playoffs esta temporada?
CONTENIDO
- Los Rockets amenazan con dejar a los Warriors sin Play-In
- Klay Thompson ya no es el mismo
- Los secundarios no están aportando lo esperado
- Draymond Green, siempre en el centro de la polémica
- ¿Aún hay esperanza?
Los Rockets amenazan con dejar a los Warriors sin Play-In
No está siendo una buena temporada para los Warriors, eso es obvio. El equipo liderado por Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green está muy lejos del nivel que les llevó, entre otros hitos recientes, a conquistar el anillo en 2022 frente a los Boston Celtics, el cuarto en la última década.
Actualmente, los de San Francisco marchan en la décima posición de la conferencia oeste, en puestos de acceso al Play-In (eliminatorias que enfrentan del séptimo al décimo de cada conferencia para definir los últimos dos equipos que accederán a Playoffs). Sin embargo, están a tan sólo medio partido de ceder esta posición en favor de los Houston Rockets, que llegan en mejor dinámica a este tramo de la temporada.
A día de hoy, que los Warriors consigan clasificarse para Playoff se paga a [4.20] en YoSports. Una cuota más que interesante para los asiduos a realizar apuestas deportivas a la NBA si tenemos en cuenta que el talento con el que cuentan los Warriors es mucho… pero ajustada a la realidad actual del equipo.
Tres derrotas en los últimos cuatro partidos han hecho saltar todas las alarmas en el equipo que dirige Steve Kerr pero… ¿todavía hay margen de reacción?, ¿cuáles son los factores que explican esta caída en uno de los mejores equipos de los últimos tiempos? Lo analizamos.
Klay Thompson ya no es el mismo
Fue uno de los mejores escoltas de la liga durante gran parte del reinado de los Warriors. Un tirador top-5, siempre fiable desde el perímetro cuando el partido se apretaba, que formó junto a Curry una dupla temible conocida como los ‘Splash Brothers’, a los que era imposible frenar. Letales ambos desde el tiro de tres, pero más que solventes cuando tocaba penetrar.
Sin embargo, llegó la maldita lesión. O las malditas lesiones, mejor dicho. En las Finales de 2019, Thompson se desgarró el cruzado de la rodilla izquierda. Cuando estaba a punto de reaparecer en la 2020/21, se rompió el tendón de Aquiles derecho. El resultado, casi dos temporadas sin jugar.
Es cierto que se puede considerar un éxito que Klay haya podido continuar su carrera. No sólo eso, desde su regreso ha ganado un anillo y ha continuado con promedios de anotación y acierto más que aceptables para un jugador promedio de liga… pero es innegable que su explosividad y su capacidad de movimiento sin balón ya no son lo que eran. Aún así, está siendo capaz de promediar 17,3 puntos, 3,4 rebotes y 2,2 asistencias. Aceptable, pero lejos del nivel de sus mejores años.
Los secundarios no están aportando lo esperado
Una de las señas de identidad de los Warriors en los últimos años ha sido su capacidad de mantener ‘enchufados’ a todos los jugadores. Incluso a aquellos con menos participación en el juego o los últimos jugadores de la rotación. Cuando a uno le tocaba dar el callo, lo hacía. Véase el sorprendente rendimiento ofrecido en momentos importantes por los Jordan Poole, Kevon Looney…
Sin embargo, si en esta temporada a los jugadores principales les cuesta desatascar los partidos… las segundas y terceras funciones no están funcionando en absoluto. Y esta circunstancia se puede personalizar en dos nombres: Chris Paul y Andrew Wiggins.
El primero fue una apuesta importante que los Warriors acometieron el pasado verano para liderar su segunda unidad, pero no está consiguiendo ser especialmente decisivo. A sus 38 años, sigue siendo un buen jugador de equipo, pero poco más está demostrando este año. En lo que respecta a Wiggins, baste con decir que está firmando la peor temporada de su carrera en todas las facetas estadísticas.
Draymond Green, siempre en el centro de la polémica
“No siento presión, me dan igual los Rockets” se ha limitado a comentar uno de los capitanes de los Warriors sobre la posibilidad de quedarse fuera de Playoffs. Green siempre ha sido un jugador duro, pero en los últimos tiempos ha estado demasiadas veces en el ojo del huracán, protagonizando episodios al límite del reglamento y, en muchos casos, antideportivos.
El último, un fuerte encontronazo con Santi Aldama. Pero antes estuvieron el pisotón a Sabonis, la llave de judo a Gobert o el mamporro que le soltó a Nurkic y que conllevó su sanción por 16 partidos. Con este historial reciente, cuesta pensar que Green pueda hacer la aportación decisiva que necesita el equipo para alcanzar los Playoffs.
¿Aún hay esperanza?
Hay dos puntos especialmente esperanzadores para los fans de los Warriors. Uno es que, a día de hoy, dependen de si mismos para finalizar la temporada en puestos de Play-In y poder clasificarse los Playoffs. El segundo, Stephen Curry. La estrella de los Warriors parece haberse entonado en los últimos meses, promedia 26,8 puntos, 4,5 rebotes y 4,9 asistencias y es el segundo favorito para conseguir el premio al jugador decisivo del año con una cuota [3.00]. Si Curry está bien, todo es posible.
El compromiso más inmediato que tienen los Warriors en esta recta final de temporada es su visita al Kaseya Center para enfrentarse a los Miami Heat. No es mala opción la victoria de los Warriors para realizar una apuesta deportiva a este encuentro, ya que están obligados a ganar y los Heat tienen prácticamente cerrados los objetivos de la fase regular. Que los Warriors ganen el partido cotiza a [1.76].
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